Buenos presagios
Terry Pratchett, de origen ingles, escribió esta novela para dar su original punto de vista sobre un hecho bíblico según él inminente
Esta historia trata de explicar de una manera graciosa y sarcástica el tan temido Apocalipsis, teniendo como personajes a gente de la Tierra, el Cielo y el Infierno. Pratchett se vale de un ángel llamado Azirafel, un demonio de nombre Crawly y un niño llamado Adán Young, para que este suceso se lleve a cabo.
Azirafel y Crawly han trabajado juntos casi desde que la Tierra se empezó a habitar de seres humanos, y desde ese entonces, aparte de mezclarse con los personajes más importantes de la época y de meter cizaña entre los ciudadanos común y corrientes, así como también de inventar situaciones para que se desaten las peores guerras que han azotado a la humanidad; todos los días trabajan duro para que el Apocalipsis llegue con bien a la Tierra.
El chiste de esta historia es que un niño que es el hijo del Diablo, pero que vive con una familia en un pueblito ingles, será el encargado de desatar el Apocalipsis por el que tanto han luchado el Cielo y el Infierno; el nombre de este niño es Adán Young que al crecer comienza a darse cuenta de los poderes que tiene usándolos para ser el terror del barrio dónde vive así como para hacerse el líder de sus amigos.
Esta historia entrelaza a diferentes personajes que sin darse cuenta tienen mucho en común ya que todos ellos son parte de las profecías de una antigua bruja de nombre Agnes la Chalada, quién a lo largo de toda su vida escribió los diferentes eventos en los que se verían envueltos los personajes antes de conocerse.
Buenos Presagios es una buena historia si les gusta leer manuscritos graciosos pero bien construidos, es largo pero se la van a pasar muy bien leyéndola, en definitiva vale la pena si quieren saber cómo será el Apocalipsis desde el punto de vista de un escritor disparatado.
Saludos desde…………………………………. la luna………………………………